Ser feliz no es tarea fácil, y mucho menos si no sabemos con certeza qué es la felicidad.

Desconocer qué es lo que buscamos, nos impide disfrutar de los logros conseguidos.

Cinco mitos  sobre la felicidad.

La felicidad es un estado puro

 Este mito nos hace creer que la felicidad es ausencia de malestar. Que solamente aquellos que no sufren son los elegidos. Pero no es así, ya que la felicidad coexiste con las dificultades y los problemas. Las personas felices son aquellas que a pesar de tener problemas se dan el permiso para disfrutar y compensar los estados emocionales negativos.

Resolver un problema te hace más feliz 

Hay personas que posponen la felicidad. Equiparan la felicidad a la calma que se produce tras una tormenta. “Cuando me recupere de la depresión entonces seré feliz.” Lo que sentiremos tras una situación difícil será alivio pero no felicidad. En ocasiones los problemas se mantienen a lo largo del tiempo y aún así podemos ser felices.

La felicidad se encuentra

No es el final de un proceso, no es una recompensa o un premio que ganamos cuando hemos pasado tras una temporada de sufrimiento.  Sufrir mucho no te da una entrada al mundo de la felicidad. La felicidad se construye de manera activa, día a día.

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El dinero da la felicidad

 El dinero no da la felicidad” suele completarse con ” pero ayuda”. La realidad es que la ausencia de dinero aumenta las probabilidades de sentirnos infelices, sin embargo  más dinero no aumenta nuestra felicidad. Es innegable que  son necesarios unos ingresos que garanticen las necesidades básicas . Pero si aumentamos el dinero progresivamente nuestra felicidad no aumentará al mismo ritmo.

La felicidad es sinónimo de placer

El placer es una emoción superficial, pasajera y tiene más que ver con el disfrute de nuestros sentidos. En cambio, la felicidad es un proceso que la persona percibe como bienestar subjetivo  y que influye en sus actitudes y comportamiento.

Eliminar estos mitos, nos permite darnos cuenta que ser feliz no significa ausencia de malestar, que la felicidad se da junto con otras emociones no tan positivas y que se trata de un proceso generado por cada uno de nosotros.

La felicidad no es la meta, la felicidad se encuentra en cada paso del camino.